TU VOZ

Días de lienzos en blanco y renglones torcidos. 

La voz no es más que el sonido del grafito rasgando un trozo de papel para dejar constancia de lo que una vez vivimos y no supimos atesorar. 

Días de gritos desgarradores disfrazados de un silencio tan denso como la oscuridad que nos abraza con la pasión de ese amante que no quiere que lo abandonemos nunca. 

La voz es ese instante de aquella otra vida que no queremos que se pierda en el olvido del tiempo. 

Días en los que la Humanidad guarda silencio porque Dios, la Naturaleza o la Vida desean hablarnos sobre las cosas que de verdad importan, porque suya es la voz para hacernos reflexionar sobre lo que fuimos, lo que somos y lo que seremos. 

Y quizá así… 

El Mañana sean días en los que regalemos nuestra voz, para volver a decir un «te quiero», un «te he echado de menos», un «cuánto me alegro de verte» y lo haremos en el tono en el que se narran los cuentos y se forjan los sueños más felices. 

Y es que no hay nada tan importante como dormir escuchando tu voz. 

Significará que todo salió bien.

Imagen by hadapoetica.blogspot.com