ESCENA V. LA MUJER ALTA (VERSIÓN TEATRALIZADA)
Quinta parte de la versión teatralizada del relato homónimo de Pedro Antonio de Alarcón (1882).
Encontraréis la cuarta escena aquí o pinchando en el hashtag "lamujeralta".
Que continúe la historia...
....................................................................................................................................
Luz tenue y sonido de desolación. Aparece Telesforo por la derecha. Está colocándose bien sus ropas. Su cara está manchada de carmín e intenta limpiarse. Llega al centro del escenario y de pronto, Telesforo se para. Mira atrás, como percibiendo a alguien sin hallar por el momento a nadie. Sigue andando, un par de pasos más y se detiene de nuevo. Esta vez mira hacia atrás más deprisa y más asustado.
Cambio de ambientación: vuelve la oscuridad, transformada no sólo literalmente, sino también de manera simbólica, en la música.
Aparece por la izquierda la Mujer Alta, lentamente. Ésta se le acerca. Telesforo toma valentía y se aproxima a ella sigilosamente, temiendo el momento. Ella se para. Él sigue pero también para a cierta distancia.
Telesforo- (Con miedo) ¿Quién eres?
La Mujer Alta no contesta y comienza a sonreír. Telesforo enloquece de miedo y se abalanza sobre ella cogiéndola por el cuello.
Mujer Alta- ¿Por qué la has tomado conmigo?
Telesforo- (Sin soltarla, con más brío y más nervioso; voz temblorosa a la vez) ¿Cómo?, ¿qué quieres decir?
Mujer Alta- ¿Por qué te asustas al verme?
Telesforo- No es la primera vez que te veo.
Mujer Alta- La primera fue la noche de San Eugenio (Telesforo va soltándole el cuello), en la calle de Jardines, hace tres años. (Telesforo se va retirando poco a poco).
Telesforo- (Asombrado) Así que recuerdas haberme visto antes.
Mujer Alta- Ya lo creo, alma mía.
Telesforo- Pero, ¿por qué me sigues?, ¿qué quieres de mí?, ¿quién eres?
Mujer Alta- Yo sólo soy una pobre mujer, débil, solitaria. ¡Tú me odias y me temes sin motivo...! Y si no, dime, ¿por qué me asustaste de aquel modo la primera vez que me viste?
Telesforo- ¿Yo te asusté?, ¿yo?... No sé quién eres pero tengo la extraña sensación de aborrecerte desde el mismo día en que nací, (gritando) ¡eres el demonio de mi vida!
Mujer Alta- ¿De modo que me conocías desde hacía mucho tiempo?
Telesforo- (Incrédulo) ¿Qué?
Mujer Alta- Pues debes saber que yo también te conocía.
Telesforo- ¿Me conocías?, ¿desde cuándo?
Mujer Alta- ¡Desde antes que nacieras! Y cuando te vi pasar junto a mí hace tres años, me dije a mí misma: ¡Éste es!
Telesforo- Pero, ¿quién soy yo para ti?, ¿quién eres tú para mí?
Mujer Alta- Ya te lo he dicho... ya me lo has dicho...
Telesforo- ¡Deja de jugar conmigo!, ¿quién eres?
Mujer Alta- ¡El demonio!
Telesforo se queda horrorizado, catatónico. La Mujer Alta le escupe y sale corriendo por la izquierda. Tras una pausa de terror y angustia, Telesforo queda en mitad del escenario intentando reaccionar a lo acontecido.
Poco a poco la iluminación baja de intensidad hasta hacerse Oscuro por completo.
Poco a poco la iluminación baja de intensidad hasta hacerse Oscuro por completo.
Continuará
Comentarios
Publicar un comentario
¡Gracias por tus palabras!